Empezar a jugar

Artículo de Sarah Pegrum traducido y adaptado por Dalila Acuña, del Equipo de Diseminación de Grupo ACT Argentina

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Por años he escuchado historias de gente que deja de hacer cosas a causa de cómo se sienten sobre su peso. Las historias que comienzan con “cuando adelgace voy a…” o “no puedo hasta que…”. Pero, mientras esperamos, el mundo sigue girando. Las personas envejecen. Las oportunidades y experiencias pasan y se van. La imagen que se me viene a la mente es de un niño, parado al costado del área de juegos de un parque mirando como todos los demás chicos juegan. Esperando. Separado de los demás por esta barrera de la construcción social del peso. Este niño se queda parado ahí. Mirando. Esperando el peso.

Esta imagen me genera tristeza por varias razones. Me da tristeza el niño mirando a los demás en los juegos, sintiéndose desconectado y perdiéndose de algo bueno. Me siento triste también por los chicos que están en los juegos porque ellos se están perdiendo de jugar con este niñito genial. Me siento triste porque el tiempo para jugar es tan fugaz. ¿Cuánto de ese tiempo efímero se va a perder estando fuera del juego?

¿Qué pasaría si diéramos pasos para quitar esta barrera y movernos para poder jugar con los demás? Esta es una posibilidad que me da entusiasmo y felicidad. Intentemos algo que ayude a a derribar esa barrera.

Ejercicio: Imaginen un rol que sostengan en su vida y sea importante para ustedes. Puede ser como madre o padre, hermana, compañero, amiga, colega, estudiante, o cualquier otra cosa. Ahora piensen en cómo es alguien que es muy bueno en ese rol. ¿Cuáles son las cualidades clave que hacen a esta persona buena para este rol? (ie. qué es lo que la vuelve un buen padre, una buena amiga, una buena colega).

Escriban esas cualidades en una hoja de papel, como lista.

Ahora, miren la lista que escribieron. ¿Aparece el peso ahí? ¿Son cosas dependientes del peso o acciones que pueden ser llevadas a cabo sin importar lo que la persona en cuestión pese?

Por ejemplo, cuando le pregunto a las personas sobre los distintos roles suele aparecer el ser amorosa, cariñosa o compasiva. No importa cuál sea el peso, es posible ser amoroso, cariñoso y compasivo hacia otra persona.

Mirando la lista, ¿hay algún paso que podrías dar hacia alguna de las cosas que están ahí? No tienen que ser pasos grandes, pueden ser pasitos de bebé.

Este es el comienzo de derribar la barrera. Entrando a los juegos hoy. No necesitan esperar afuera. Den un pequeño paso. Muéstrennos qué puede pasar.